LA SOLEDAD: DOS CRISTALES PARA VIVIRLA

Soledad significa estar solo sin acompañamiento de una persona u otra cosa, puede tener origen en diferentes causas, existe la soledad impuesta por la vida, ante una situación específica, desilusión, depresión, perdida de un ser querido, una enfermedad contagiosa o hábitos socialmente distraídos. 

Pero en ninguno de estos casos, se sostiene por mucho tiempo, ya que se convertiría en desagradable. El ser vivo no nació para estar sumido en soledad permanente, a no ser en casos específicos donde el aislamiento o reclusión se manifiesta ante delitos que conlleven a ello.

Existe otro tipo de persona que necesita esta soledad, la prefiere, como el espacio personal y silencioso donde puede encontrarse, y explicarse sobre sus propias conductas, buscar ayuda divina para enriquecerse de armonía y paz y desde ella poder cocrear en la luz y la sabiduría. Por ejemplo, los monjes la ven como una forma de iluminación. También abundan los filósofos que, además de recomendar llevar una vida tranquila y solitaria, ven la soledad como una forma de alcanzar la excelencia, se ha llegado a plantear que la soledad es la suerte de todos los espíritus excelentes. También hay psicólogos y psiquiatras que, recomiendan aprovechar y disfrutar de los ratos de soledad. Es curioso, pero se ha comprobado que los jóvenes suelen adaptarse mejor a la soledad que las personas mayores, quizá por tener menos cumulo de recuerdos de vivencias acumuladas con el paso de los anos.

En conclusión, la soledad vista desde sus dos caras también forma parte de nuestra libre elección a la hora de vivir, ahora la decisión es meramente suya.